MONOLITO
Se incluye entre las formas que desde antiguo fueron llamadas “ejes del mundo”, por conectar el cielo y la tierra. En la literatura de distintos pueblos, escaleras, lianas, montañas y árboles son formas de acceder al cielo. Así lo relatan varios cuentos infantiles e historias, como por ejemplo la del Mago Merlín, cuya sabiduría se nutría del roble; o la de Jacob, que en sueños vio la escala por la que los ángeles subían y bajaban del cielo. También los obeliscos egipcios, símbolo de los rayos de su dios solar, cumplían esa función.
En cada Parque un Monolito de acero inoxidable fija las coordenadas espacio-temporales.